lunes, 14 de mayo de 2012

EL PASO

El paso está anegado, embarrado, el paso entre el desasosiego que produce la oscuridad y la confortable calidez de la luz.

El paso está anegado, embarrado, con las huellas aún marcadas de los que lo intentaron cruzar.

El paso está anegado, embarrado, algunas huellas se detienen en el borde sombrío del paso y vuelven a internarse en la oscuridad.

El paso está anegado, embarrado, algunas huellas se pierden en la mitad sin volver a aflorar en ninguno de los sentidos, pasos que se
hundieron en el intento por cruzar.

El paso está anegado, embarrado, algunas huellas se adivinan al otro lado, los pasos afortunados de los que lograron cruzar.

El paso está anegado, embarrado, algunos se resignaron y se dieron la vuelta, otros lo intentaron pero fracasaron, otros lograron cruzar.

El paso está anegado, embarrado, nosotros lo estamos cruzando, con fango hasta en las cejas, empapados de incertidumbre, dando la espalda a la oscuridad y con la mirada puesta en la reconfortante luz, nuestra esperanza.

El paso está anegado, embarrado, estás al otro lado de la luz, en el umbral de la oscuridad… ¿Te atreves a cruzar?


2 comentarios:

  1. Con la que está "cayendo" es normal que el paso esté anegado y embarrado, lo que no me explico es como queda aun señal de él, de todas forma lo intentaré... un saludo.

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  2. Hay que atreverse, y no sería bueno ni justo andar después llorando la falta de atrevimiento.

    Esa foto es estupenda, recuerda tantos recodos así, en que había ( y hay ) que buscar la manera de enfangarse lo menos posible, incluso buscar otro paso, pero pasar, pasar:

    seguir camino... incluso en lo apuntado por la metáfora, en estos pasos y angostos y estrecheces, materiales para unos, de miras para otros,,


    Abrazos

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