lunes, 4 de marzo de 2013

MI EXPLORADORA

Mi exploradora se aventuró con valentía y decisión, confiando en el norte que marcaba su brújula. Se adentró empeñada en acceder hasta lo más profundo, deseando conocer, sabiendo respetar, aceptando la naturaleza de las cosas. Se lanzó con su sonrisa perpetua, con su férreo optimismo, segura de sí y de lo que buscaba, y una vez encontrado,  montó su campamento decidida a permanecer hasta el final  de los tiempos.

No, no hablo de que se aventurara en la montaña, que también, hablo de que se aventuró a explorarme a mí como nadie ha sabido hacerlo jamás, y es por eso que ella, mi exploradora, ha logrado conocerme mejor que nadie y convivir conmigo sin alterar mi esencia.

 

2 comentarios:

  1. Que original declaración de amor... que nunca perdáis el norte, un saludo.

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  2. Coincido con Mamé, es una historia muy genuina. ¡Me gusta!

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