miércoles, 25 de noviembre de 2020

CUENTOS DE NAVIDAD PARA UNA SOCIEDAD INMADURA

 

El mantra “Salvemos la Navidad” puede dar lugar a que la noche del 5 de enero, en vez de los Reyes Magos con sus camellos, lleguen los Jinetes del Apocalipsis con sus caballos y sus vientos de destrucción. Es lo que tiene bregar con una sociedad inmadura, carente de empaque para afrontar las crisis con determinación, una sociedad caprichosa y mal criada.

Cuando constato en los medios de comunicación esos comportamientos, siempre me remonto a una crisis infinitamente más terrible como fue la 2ª Guerra Mundial. Por ponernos en situación, el Blitz nazi sobre Inglaterra que comenzó en septiembre de 1940 y que dio lugar a 8 meses de bombardeos consecutivos que buscaban desmoralizar al pueblo inglés.

Evidentemente, una de las primeras medidas que se toman en esas situaciones es la de establecer un férreo toque de queda, fuera luces, y la movilización de todos los civiles para destinar sus esfuerzos a la defensa del país, en aquel caso, contra el virus del nazismo. Es decir, los civiles no movilizados en el frente, tenían que producir diariamente de sol a sol y de sol a luna, de lunes a lunes, cobrando en especias a través de las cartillas de racionamiento. Y sin chistar la boca. El sacrificio por el bien común es lo que tiene.

¿Alguien imagina a Winston Churchill dirigiéndose a su pueblo en noviembre de 1940 en términos de “salvemos la Navidad? Esto es, en directo desde la BBC,  señores y señoras,  hemos constatado que  desde que apagamos las luces por la noche, la curva de víctimas por los bombardeos ha empezado a descender, por tanto, tontos, si mantenemos esa curva descendente durante todo noviembre, lo mismo podemos encenderlas en Navidad y celebrarla juntos entorno al gran abeto de Trafalgar Square. Y no os preocupéis por Hitler, que seguro cae bajo el influjo del espíritu navideño y acaba cantando con nosotros Noche de Paz, Stille Nacht como diría Adolfito. Además, la toma de Berlín será en Enero, un paseo militar.

Pues eso. Serían cuentos de Navidad para una sociedad inmadura, y si en aquella época hubieran sido así, hoy día estaríamos desfilando al paso de la oca, ¡¡links, rechts, links, rechts!¡

¡¡AR INH!!

 

 

 

1 comentario: